A medida que vas profundizando en la exploración onírica descubres que se te presentan infinitas posibilidades. Cuanta más atención prestas al Sueño, más interés pone él en tí y más información útil te proporciona. Algo que no pasa desapercibido para la mayoría de los Onironautas serios es el hecho de que los sueños muestran de una manera muy pintoresca (artística diríamos) las posibilidades del futuro inmediato. Y esto ocurre, particularmente, en fechas que nos resultan significativas. Continúa leyendo...
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¿Verdad que resultaría maravilloso que pudieramos contar con un secretario que nos informase de las posibilidades, oportunidades y/o potenciales reveses que nos fuesen a acontecer en días sucesivos?...
Y, sin embargo, este secretario existe. Es el Sueño (nuestro querido Morfeo) que conoce todos los recovecos del subconsciente, así como los intrincados mecanismos ocultos de las leyes de causa y efecto.
Si estás practicando seriamente las muchísimas sugerencias que se reparten a lo largo y ancho de esta web, esta idea no te resultará tan extraña. De hecho, los sueños nos pueden ayudar a resolver problemas de una manera muy efectiva. Veamos un ejemplo real:
Una mujer joven "pidió" a su Morfeo que le ayudase a resolver un problema. Por diversos motivos que no viene al caso relatar, está separada de su marido. Pero este se empeña en seguir formando parte de su vida, a pesar de que las diferencias parecen ser irreconciliables. Esta mujer trabajadora y con un hijo no se decide a vivir plenamente su vida, de tal forma que se desenvuelve en una angustiosa indecisión: por una parte le da pena su marido, que se muestra inmaduro emocionalmente y, por otra, dada la situación, no puede vivir una vida libre, independiente y plena. El caso puede resolverse fácilmente pues sólo plantea dos opciones... dejar claro que no desea vivir con esa persona (y actuar en consecuencia) o bien volver a vivir con ella asumiendo plenamente el rol que le toque. Quede claro que no pretendemos ni ser ni dejar de ser moralistas en sentido alguno. La vida es mucho más que las normas que inventamos sobre ella. Finalmente la vida es para vivirla y punto. Esta es la respuesta que le dio Morfeo:
"Viajaba en coche con mi hijo. Mi marido iba detrás en otro coche. Los faros de los que venían de frente me deslumbraban y no veía nada. Sentía que la situación era peligrosa. Al llegar a un pueblo veo un camión de corderos y un león suelto. Me dió miedo. El león alcanzó dos corderos. A uno lo estampó contra una pared y al otro lo devoró. Mi marido se fue huyendo por otro camino. No lo volví a ver en el sueño. Me di cuenta que yo iba manchada con despojos del cordero muerto. Salté una tapia con mi hijo para entrar en una casa. Estaba muy asustada y me costó saltar ese muro. En la casa había una mujer muy anciana con un gorro que representaba una ciudad. Le dije que había un león pero se mostró totalmente tranquila..."
Bueno, está resumido este sueño. Pero es muy significativo... muestra el temor a tomar decisiones y que la propia luz de los faros que alumbra el camino, por causa de esta indecisión, deslumbra. El león representa siempre la Ley, el Destino, lo que debe hacerse. El cordero es la mansedumbre, pero en su sentido negativo la humillación consentida, "ir como cordero al matadero". Cuesta trabajo saltar la valla de las decisiones, particularmente por el miedo, el apego, el sentimentalismo... al otro lado de la valla está una nueva casa... en cierto sentido una nueva vida emocionalmente más estable, con el hijo en este caso. La viejita es una mujer sabia, está tranquila. Pero la protagonista está manchada de despojos de cordero porque así es su personalidad, y ella sabe que es su peor obstáculo. Naturalmente el sueño le muestra cosas que ya sabe pero le permite estar más segura de la decisión que debe tomar.
Este es un ejemplo de como el Sueño ("nuestro Morfeo") nos ayuda a vivir sabiamente.
Lo más curioso es que también hace las veces de secretario informándonos de los planes que la Vida tiene para nosotros en un futuro inmediato. Y, como decíamos, esto ocurre particularmente en fechas significativas y a condición de que nuestro interés por el sueño se mantenga día a día.
¿Cuales son esas fechas significativas?... Todas aquellas que marcan un comienzo, aún simbólico, de un nuevo período. Por ejemplo: los primeros días del año que, para nuestra cultura actual mayormente son los primeros de enero. Coincidimos muchos en que se plantea, en el sueño, un pequeño guión de lo más significativo de cada més, día a día, los doce primeros de enero. Así la noche del 31 de diciembre al 1 de enero (noche de poco dormir, por cierto) representa todo el mes de enero. La noche del 1 al 2 el mes de febrero, la del 2 al 3 el mes de marzo y así sucesivamente hasta la noche del 11 al 12 de enero que representa el guión del mes de diciembre próximo. Y esto se suele cumplir, más o menos, en todas las personas que se predisponen a ello. O sea, a partir de ahora posiblemente todos los que esteis leyendo esto.
Nuestro consejo es que tengais siempre a mano, esos días (y mejor todos los del año) vuestro
"diario de navegación" para anotar cuidadosamente todas las incidencias de vuestras experiencias oníricas. Luego es cuestión de trabajar con ese material de acuerdo con las indicaciones de la sección
"Interpretación de los sueños" para extraer su significado y asociaciones por medio del trabajo con la intuición, que es el más perfecto y seguro.
Pero aún hay otros días especiales, como el de vuestro cumpleaños. Esa noche tal vez (sobre todo si ese es vuestro interés y así se lo manifestais a vuestro Morfeo) obtengais un esquema de lo que ha de ser, a grandes rasgos, lo más destacado del nuevo año que comienza para vosotros.
Y aún podemos contar con otras fechas menores como el comienzo de cada estación (con datos referidos a aproximadamente los tres meses siguientes), los días uno de cada mes (o sea la noche del 31 al 1) que os mostrará algunas cosas interesantes del mes que comienza. Si queremos ser puntillosos en esto también podríamos pensar en el inicio de semana (noche del domingo al lunes o la del sábado al domingo según las cultura en la que nos hayamos desenvuelto).
Nosotros le damos más importancia a los doce primeros días del año, al del cumpleaños y, a veces, a los días primeros de mes, especialmente si esperamos acontecimientos particularmente interesantes o necesitamos tomar ciertas decisiones. Os aseguro que nos resulta muy util y los consejos que extraemos son absolutamente maravillosos.
Sobre todo no os olvideis que si necesitais un consejo, hay alguien que siempre está cerca de vosotros, os conoce y, además, desea siempre ayudaros con toda su enorme sabiduría. Nos dispensareis que lo hayamos denominado "nuestro Morfeo" pero es que la técnica que utilizamos es la de dirigirnos a
él como si del mejor amigo se tratase, justo cuando él nos va a tomar de la mano... es decir, cuando se ilumina para nosotros "el Cine de las sábanas blancas".
Feliz Navegación.
VUELVE al recibidor tras la PUERTA 7.
Vete ARRIBA
y toma el Hilo de Ariadna.