El Club
de los Onironautas

LA INTERPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS
Aprende a interpretar tus sueños instantaneamente...

El conocido psicólogo francés Paul Jagot afirmaba:

"La evolución de las ciencias psíquicas ha arrojado ya suficiente luz sobre los actos de premonición como para que no se permita considerar absolutamente vana la búsqueda de presagios o advertencias en la trama de los sueños.

Por supuesto, creer, según las afirmaciones de una "clave de los sueños" que, inevitablemente se morirá en el año en curso porque se soño perder los dientes incisivos nos parece de una lamentable ingenuidad.

Los antiguos practicantes de la oniromancia jamás siguieron un código formal y rígido; al contrario, aplicaban ante todo el gran principio de la filosofía: la ANALOGÍA, y tenían en cuenta observaciones anteriores repetidamente verificadas, adaptándolas con flexibilidad y perpicacia a cada nuevo problema.

En determinadas condiciones psicofísicas (con particularidad en la hipnosis) el ser humano, como sabemos bien, muestra aptitudes para la precognición de acontecimientos futuros, así como para la percepción de objetos y de personas situadas fuera del alcance de sus sentidos físicos.

De modo semejante, el sueño natural se acompaña a veces de percepciones premonitorias. Es perfectamente admisible que las imágenes percibidas se traduzcan entonces en el espíritu del durmiente bajo una forma más o menos vagamente simbólica, y no se necesita más para justificar la antigua creencia en el valor profético de las imágenes que pueblan nuestros sueños".


A continuación incluimos una experiencia vivida por Carl Gustav Jung y narrada en su libro "Recuerdos, sueños y pensamientos":

"Soñe que la cama de mi mujer era una profunda fosa con muros tapiados. Era una tumba y recordaba algo antiguo. Entonces oí un profundo suspiro, como cuando alguien expira. Una figura que se parecía a mi mujer se incorporó de la tumba y surcó los aires. Llevaba una túnica blanca en la que había bordados extraños signos negros. Me desperté y desperté a mi mujer y miré la hora. Eran las 3 de la mañana. El sueño había sido tan extraño que pensé en una defunción. A las siete llegó la noticia de que una prima de mi mujer había muerto a las 3 de la mañana.

Cuando se tienen experiencias de este tipo se toma un cierto respeto por las posibilidades y aptitudes del inconsciente. Sin embargo hay que ser siempre crítico y saber que tales comunicaciones pueden tener un sentido subjetivo, pueden coincidir con la realidad o no.

No le falta razón al eminente psicoanalista pero estamos aquí enfrentados a un hecho concreto: su experiencia es "real" en el sentido de que vió y oyó al familiar de la esposa en el momento y hora en que fallecía. Faltaría dilucidar el por qué de los extraños simbolismos, a saber: la cama convertida en fosa sepulcral "con muros tapiados", la figura que "se parecía a mi mujer" y la blanca túnica "en la que había bordados extraños signos negros".


Evidentemente el Lenguaje de los Sueños es comparable al Lenguaje de las Parábolas: tanto el simbolismo de los sueños como el de las parábolas no debe ser interpretado de manera literal. Para entender su significado es necesario establecer conscientemente una conexión con la misma fuente de tal lenguaje.

Con toda seguridad, el mero razonamiento intelectual no sirve. Es necesario que nos situemos en un nivel más allá del pensamiento discursivo ordinario.

Para ello podemos familiarizarnos con sencillas tecnicas de meditación o interiorización. Este puede ser un procedimiento eficaz:

PRÁCTICA DE INTERIORIZACIÓN

Siéntese el interesado en un cómodo sillón, o de la forma que crea más conveniente. Relaje muy bien todos los músculos de su cuerpo. Relaje su mente separándola de las preocupaciones habituales (comprenda la inutilidad de pensar en tales instantes). Realice algún acto de devoción según su religión o creencias particulares. Busque " aquello que pueda iluminarle dentro de sí mismo". Ahora, tranquilamente, reconstruya el sueño del cual pretende extraer su significado. Reconstrúyalo con la intención de volver a vivirlo conscientemente. Deje que un poco de sueño se apodere de su cuerpo pero manteniendo la lucidez de la experiencia. Vívalo sin pensar. Despreocúpese y fluirá hacia usted una fuente de ideas intuitivas. Hágase consciente de todas las asociaciones, relaciones e ideas que le vayan surgiendo, por extrañas que le parezcan. Le sugerimos anotar el resultado de estas prácticas en su libreta de sueños. 

DOS PUNTOS A TENER EN CUENTA

1) El primer pensamiento o idea que aparece en tu mente justo cuando tu cuerpo se despierta está total y directamente relacionado con la experiencia onírica que acabas de vivir. A partir de aquí ya tienes la relación fundamental.

2) Cuando vas por la calle y la vista de un coche rojo (por ejemplo) te recuerda la experiencia onírica de esa noche... existe una relación de sincronicidad. Tira del hilo y observa lo que estás pensando, sintiendo y haciendo en ese momento.

Estos dos puntos podríamos llamarlos "las pistas que te da Morfeo".

Con la práctica este proceso de auto-observación se vuelve automático. Un inmenso mundo de relaciones creativas se pone a nuestra disposición.