Recopilación caótica de todo tipo de escritos, conversaciones, frases y correos de la comunidad onironáutica
IMAGINA
Imagina, dijo el abuelo mientras acariciaba la cabeza de su nieto, que el silencio se viste de palabras para salir a pasear por el mundo, pero que nunca nunca deja de ser silencio; imagina que esta tarde de domingo es al mismo tiempo una tarde de lunes, una noche de miércoles y una madrugada de viernes, puesto que en este instante en que digo "instante" se han reunido todos los segundos vividos y por vivirse; imagina que has cerrado los ojos y
dentro de ti ves cosas que no veías con los ojos abiertos, que descubres el miedo en la aparente seguridad de los seres y la ternura detrás de las máscaras humanas; imagina que ese al que ves en los espejos no eres tú sino otro, pero que ese otro está convencido de que es tú, de la misma manera en que estás convencido de que tú eres él, pero que bastaría un súbito aleteo
de mariposa para que despertaras y descubrieras que en el fondo no eres otra cosa que el viento, la lluvia, el silencio, una piedra musgosa y la estrella lejana que tantas veces miraste desde tu cuarto; imagina que nada es cierto, excepto los sueños, dos o tres grafitis borrosos, un puñado de versos que navegan dentro de una botella en mar abierto, y palabras como libertad, plenitud y encuentro, dichos en la oscuridad, al oído, en un susurro apenas
perceptible; imagina que eres un abuelo que estás sentado en la banca de un parque un domingo por la tarde y que mientras acaricias la cabeza de tu nieto, le dices: imagina que eres un abuelo que acaricia la cabeza de su nieto un domingo por la tarde. Cuando por fin el abuelo guardó silencio, el niño levantó el rostro, miró fijamente al anciano y dijo, sonriendo: me lo imagino. Y enseguida, todo desapareció.
Edgar Allan García- (Ecuador) http://www.inter-dec.com/edgarallan
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Hace años, solía estar muy metida en el mundo de espiritual y era muy frecuente que tuviera sueños, un tanto raros. Ahora que me ha dado por mamar la vida cruda del sexo, las drogas y el rock&roll, ( vamos, lo que quiero decir es que tengo los pies en la tierra demasiado tiempo), ya no tengo esa clase de sueños, y la verdad, es que lo echo de menos.
Uno de los más bonitos que tuve por aquella época, y que me dejó bastante extrañada fué uno en el que me veía a mí misma, ( normalmente, cuando sueño, jamás suelo verme, es una visión panorámica, como cuando miras a través de un objetivo), y yo era un hombre de melena pelirroja y rizada, con una barba tupida, vistiendo una túnica blanca y unas sandalias. Me encontraba durmiendo debajo de un árbol, que más tarde reconocí como un olivo. Alguien me llamó, un hombre de melena larga y oscura, también con barba. Yo respondía al nombre de Marcos. Dicho hombre me dijo que teníamos que irnos corriendo, que el Maestro nos llamaba. A mi alrededor habían más hombres durmiendo bajo la sombra de los olivos. Todos nos incorporamos y comenzamos a correr, hasta llegar a una playa, bordeada por paredes rocosas. En el centro de la playa, había una hoguera.
Todos la rodeamos, y la hoguera comenzó a hablarnos con la voz más profunda y tranquilizadora que jamás he escuchado. Al despertar no recordé nada de lo que nos había dicho la hoguera, y sigo sin recordarlo, tan sólo recuerdo que era una especie de explicación de lo que es el Universo, y de la esencia en que está hecha la raza humana, cuál es nuestro origen y nuestro fin. Sé que era una Verdad Universal, pero no recuerdo bien cuáles fueron sus palabras exactas.
Con esto no quiero decir que considere haber sido uno de los Apóstoles, primera y principal porque no creo en la Iglesia, y porque creo que la Biblia no es un relato del todo real, sino metafórico. Más bien creo que fue uno de los tantos sueños sin sentido que he tenido, pero fue bonito, y tan real.................
Besos.
Beatriz (España)
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Hola! Antes que nada los felicito por la página, encontre muchas cosas que me resultaron de gran interés.
Les cuento que me llamo Eugenia, tengo 17 años, y siempre me intereso el tema de los sueños y de los viajes astrales. Siempre fui buena relajandome hasta no sentir mi cuerpo, pero tuve una experiencia que me hizo tener miedo a relajarme asi de nuevo. Fue hace unos meses, estaba muy cansada y me fui a acostar, casi siempre cuando dejaba de sentir parte de mi cuerpo, dejaba de
sentir las manos por ejemplo, las movia para ver que siguieran ahi (no se porque), pero este dia estaba tan cansada que me deje estar, y de repente es como si estuviera flotando y como que me veía a mi misma, pero la imágen no era muy clara, me acuerdo que atravese la habitacion de mi pieza y me vi en el cuarto de mis padres, pero durante todo esto (que habran sido unos segundos) escuchaba como voces fuertes que me asustaron, del susto me
desperté, y despues de eso tuve miedo de relajarme.
Eugenia Carrasco
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LA ESTACIÓN DE LOS AMORES (Canción de Battiato, por cierto)
Este sueño aconteció durante mi adolescencia, contaría con unos quince años.
El escenario es una estación de trenes o de metro, quizá más bien de metro porque no se ve nada del exterior. Todo es de color blanco, azul o mezcla de ambos, es decir, blancoazulado. La estación está desierta y aguardo mi tren sentado en el extremo derecho de un banco de color blanco (como hecho de madera pero con la apariencia de estar hecho de frío metal). Mi aspecto es el de un hombre más adulto de lo que realmente era, como de unos 24 o 25 años... Bien, que estaba en el filo del banco (tipo Forrest Gump), de cara a los raíles. (Los raíles no éstaban más abajo que la plataforma sino que aparecían a la misma altura, como los de los tranvías a la altura del pavimento de las calles). La escena se me antoja muy futurista, así como si transcurriera cincuenta o cien años más adelante que mi tiempo real.
Entonces una joven se sienta en el extremo opuesto. Está silenciosa y sus movimientos son mínimos, es como si no hubiera atmósfera y por tanto el sonido no fuera posible. Nos miramos. A mí enseguida me entra el "pavo" porque descubro que me atrae intensamente.
Tengo que aclarar que las imágenes son como secuencias de una película.
Así que en una especie de fundido en negro, un pequeño corte, la imagen que aparece es que yo estoy sobre ella, completamente desnudos los dos. Evidentemente hacemos el amor, y no lo entrecomillo porque realmente aún habiendo sexo sentía amor. Reparo a pesar de mi excitación en pequeños detalles y en una especie de desdoblamiento soy capaz de pensar y de analizarla. Su pelo es castaño y con leves ondas, media melena. Su piel es blanca, preciosa y suave, cálida. Sus pechos son divinos y acogedores, nada agresivos. Su rostro es bellísimo aunque no se acople a los cánones típicamente establecidos. Sus hombros también suaves y esbeltos. Sus ojos son grandes aunque en ese momento los tiene cerrados. Sus labios son carnosos, sonrosados y los tiene entreabiertos, siento su jadeo sobre la base de mi cuello mientras yo entro y salgo de ella.
Me alegré de no haber llegado al orgasmo en el sueño, habiendo despertado antes, porque aún siendo un sueño tan erótico, tan carnal, sentía que me había enamorado de la "mujer de mis sueños" y sentía que era correspondido, todo era "perfecto" y sentíame en el séptimo cielo.
Manuel López (España)
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MARTE
Bien, debió de ocurrirme por el mes de abril de 1.992, por cierto una etapa en que se me presentaban dilemas bastante comprometidos para mí.
Resulta que en el sueño soy una presencia invisible, curiosísima. Me encuentro en un "gran centro de operaciones", o una especie de inmenso laboratorio (el color es blanco azulado). Escorado a la derecha de un sujeto, detrás de él, observo como hace su trabajo. Viste traje como de astronauta, de un blanco radiante, impoluto, pero la escafandra la tiene quitada. De repente mi visión sale de allí para ver un panorama sobrecogedor, maravilloso; es la superficie de un planeta todo anaranjado, tierra y atmósfera, y sobre su horizonte se pone un enorme sol rojo-anaranjado. La quietud es conmovedora, todo fluye con lentitud beatífica, me encuentro consolado.
Pero repentinamente vuelvo a observar al sujeto con traje de astronauta, manipula una consola de mandos y oigo que por radio le dicen: -"Vamos a iniciar el experimento. Mucho cuidado con las vibraciones". Entonces el individuo asiente con la cabeza y queda como a la expectativa.
Después me sobresalto porque veo que a mi izquierda, y algo más retrasado que yo, pero poco, aparece un gigante vestido también con traje de astronauta. Es enorme, debe medir como unos dos metros y medio, y es también excepcionalmente fuerte. Al principio no sé porqué lo identifico con un ángel...Quizá un ángel, pero exterminador...Siento pánico mirándole a pesar de tener la certeza de que no pueden verme. Su cara presenta una sonrisa helada, tiene los cabellos rubios, la mirada entre severa e irónica.
Súbitamente extiende el brazo en dirección al otro astronauta, al tiempo que este se gira y lo encuentra. Sin mediar palabra el gigantón hace que de su brazo extendido parta un haz de luz azul metálico, como una corriente eléctrica que impacta y envuelve al otro astronauta obligándole a situarse en posición vertical, levitando a metro y medio del suelo. El astronauta "normal" empieza a temblar, lleno de convulsiones y en cuestión de segundos se va contrayendo adoptando el aspecto de una momia. Se resecan sus miembros, sus músculos apenas cubren ya los huesos, y angustiosamente veo que se le gira el cuello y su cara se enfrenta a la mia, sus cuencas vacías "miran" hacia mis ojos y me dirige lo siguiente: -"Nos veremos en el vacío".
La situación me espeluzna y despierto bañado en sudor.
Manuel López (España)
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...Los sueños para mí son rompecabezas que uno tiene que ir formando, analizando paso a paso que significa cada cosa para llegar a una solución,,,, en cuanto a mi persona ME CONOZCO es por eso que descifro mis sueños, porque nadie mas conoce mi vida a parte de Dios. Los Sueños son parábolas, tienen que descifrarse al momento de DESPERTAR.
Si no ... no tuviste sueños . . .
Jorge Luís "Joguar"
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Una idea, para hacer lo que uno quiera en el sueño, consiste en tratar de mirarse los pies en el momento de estar soñando, si puedes hacer esto, lo demas sera papita frita.
Wilmer Jozanjo (Venezuela)
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Es todo lo que puedo decir, estoy perpleja. Cuando busque un nombre para mi e mail, me vino a la cabeza este nombre dulce "onironauta"...nunca recordé donde lo había leído o escuchado...o si lo inventé o si estaba en mi inconciente colectivo...tal parece que así fue y que una vez más la sincronicidad actuó como una pieza de reloj. Ayer me llegó un mail de un amigo que me da vuestra dirección y ni sospechaba que eran muchos más los onironautas (bueno igual golpe a mi ego, yo pensé que era muy creativa, pero bueno...).
Salud y éxito colegas onironaúticos desde Chile
Onironauta chilensis: Anita Guerrero, ONIRONAUTA@entelchile.net
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Llevo muchos años estudiando y practicando estos temas.
Aunque soy de Granada, España en México encontré un yerbero que me
recomendó para multiplicar mis sueños y poder dormir una planta onirógena
la llamó tachic y es la calea zacatechichi.
Su sabor amarguísimo en infusión y mi poco gusto por el arte de fumarla me
impidieron poder corraborar este consejo.
¿sabeis de otras plantas onirógenas?. Según la tradición tomar una infusión
de laurel hembra abtes de dormir puede propiciar los sueños proféticos como
hacian las sibilas. A mi lo único que me hace es reconfortarme el estómago.
Quizá sea necesario algo mucho más potente como la salvia divinorum o divina pastora.
Rafael Casares (España) explora2@arrakis.es
Pulsa aquí para leer un curioso relato literario-surrealista aunque verídico según la autora: Leticia Cortés
El laberinto sigue por una exposición de perlas extraidas del Foro Mundial de Onironautas, eso si, hace ya unos pocos años... PULSA AQUÍ.
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